Las increibles aventuras de marcianito luminoso!
miércoles, enero 31
Bienvenidos a La Serena.
A pesar de que eran las 6 de la mañana, aun no salia el sol, y estabamos con ropita de dia soleado, nos sentimos importantemente felices por bajar de ese bus de moledera y poder movernos un poco para quemar un poco de calorias y liberar un poco de calor.
Cuando puse di el primer paso, me senti como se debio haber sentido neil armstrong cuando llego a la luna. Que horrible es mi arrogancia de pensar que me pude sentir igual que el primer hombre que dio un paso en la luna, pero en realidad, me referia al paso que ejemplifica a la culminacion fisica de un largo viaje.
Ustedes me entienden.
Nos pusimos las mochilas al hombro y casi inmediatamente se nos presento ante nosotros, firme como un muro de rocas, una duda irremediable: Y ahora, que vamos a hacer?
Asi que lo primero es lo primero. Partimos al baño a sacarnos las inmundicias de la cara, de los ojos, de las muelas, lo que nos daria el derecho innegable de vagandear por la ciudad en forma... decente.
En sentido figurado, claro.
Tomamos nuevamente nuestras mochilas, y caminamos al primer lugar que debio ser un destino seguro: El mar, y su faro.
Que fabulosos son los faros. Si hay algo que debo agradecer a la civilizacion humana, es la creacion de los faros. Son enormes, comunmente bellos, se encuentran en lugares fantasticos, por lo general roquerios, y son recientemente inutiles y obsoletos.
Razon por la cual logicamente podria pensarse que deberian ser eliminados, y aunque se han resistido a desaparecer, lo iran haciendo poco a poco, a menos que comiencen a considerarse patrimonio historico mundial.
Y dudo que lo hagan.
Sea como sea, parti al faro de La Serena con la mas grande de todas las ilusiones, motivos a los cuales ya me he referido, y al llegar, me encuentro con la mas absurda y enorme de todas las desiluciones.
Una mole enorme de concreto viejo, mal pintado, gastado, rayado completamente, descascarado, derrumbado y a punto de desplomarse.
Si lo van a tener asi, mejor lo echan abajo, porque es una verdadera verguenza. Es el emblema de la ciudad, y ahora es cuna de delincuentes y marginales.
Una pena.
Pero esta en la playa, en la arena. Asi que antes de que saliera el sol, ya estabamos tirados de espalda al cielo, mojados como asnos por la bruma marina matinal, el aire salado, y ese frio costero del norte, que porfiado como el mismo, se introduce por los poros y te congela el centro de los huesos.
Algo asi.
Despues de la deprimente realidad, se presento ante nosotros una duda aun mayor que la anterior, porque ahora si que no teniamos nada que hacer. Era domingo, eran las 6 y media de la mañana, y nada de nada, habia que pudieramos hacer.
Bueno, la imaginacion es grande... asi que caminamos de vuelta, los 3 kilometros que nos separaban del terminal de buses, donde dejamos los bolsos, y armados solo con la camara y un gas paralizante de defensa personal, salimos a recorrer la en ese entonces, desconocida y fantastica ciudad de la serena.
Desilucionados por la aventura del faro, nos pusimos a caminar por la ciudad, y lo que encontramos nos dejo babosos y recalcitrantes.
Callecitas de puerto, silenciosas y limpias. Una calma que viajaba con nosotros a la vuelta cada esquina, mientras las sombras que fueron hace minutos alargadas, se convierten en colores y formas fantasticas.
Casitas blancas bien definidas, con su cultura propia y una identidad unica que las hacia diferentes de todas las demas, pero a la vez iguales a todas, por compartir ese fabuloso legado de pertenecer a esa ciudad.
Un fabuloso legado.
Pasaron las horas, y nosotros pasamos con ellas. Llego el hambre, y contentos la combatimos, recorrimos calles, pasajes, lugares, museos y centros comerciales. Buscamos alojamiento y cuando una casa nos parecia bonita, nos invitaban entrar para conocerla.
¿Quien dijo que la gente del norte era poco amigable?
Dormimos tirados en el pasto de una plaza, devorados por las hormigas, esperando una banda callejera que nunca se presento, caminamos, caminamos, y seguimos caminando, y cuando terminamos de caminarlo todo, volvimos a caminarlo todo otra vez.
Todo con la desinteresada y sincera ayuda de cristobal, mi gps. Que maravilla es la tecnologia que nos facilito tan fastanticamente todas las cosas.
Cuando encontrabamos algo que nos parecia interesante, marcabamos el punto, y luego para volver al lugar, el aparatito nos guiaba por las desconocidas y reconditos vericuetos de una ciudad anonima y completamente ajena.
Llego la tarde, con ella el sabor eterno de un atardecer marino, las personas que se retiraban ya a sus casas, y nosotros sin todavia lugar para alojar. Sentados al frente del mar nos despreocupabamos de la inevitable preocupacion de encontrar alojamiento.
Pero este mundo cruel, de tan cruel que es, es hermoso y bondadoso al mismo tiempo, nos entrego todo resuelto para que no tuvieramos que preocuparnos de nada.
Mi primo nos fue a buscar para que fueramos a dormir a la casa de mi tia. Hay veces que uno se preocupa por tonteras que no valen la pena y es porque muchas veces uno olvida que esta rodeado de personas hermosas que te solucionan los problemas, muchas veces sin haber pedido nada. Que alegria saber que estamos rodeados de personas de buen corazon.
Fue un dia muy feliz.
Cuando puse di el primer paso, me senti como se debio haber sentido neil armstrong cuando llego a la luna. Que horrible es mi arrogancia de pensar que me pude sentir igual que el primer hombre que dio un paso en la luna, pero en realidad, me referia al paso que ejemplifica a la culminacion fisica de un largo viaje.
Ustedes me entienden.
Nos pusimos las mochilas al hombro y casi inmediatamente se nos presento ante nosotros, firme como un muro de rocas, una duda irremediable: Y ahora, que vamos a hacer?
Asi que lo primero es lo primero. Partimos al baño a sacarnos las inmundicias de la cara, de los ojos, de las muelas, lo que nos daria el derecho innegable de vagandear por la ciudad en forma... decente.
En sentido figurado, claro.
Tomamos nuevamente nuestras mochilas, y caminamos al primer lugar que debio ser un destino seguro: El mar, y su faro.
Que fabulosos son los faros. Si hay algo que debo agradecer a la civilizacion humana, es la creacion de los faros. Son enormes, comunmente bellos, se encuentran en lugares fantasticos, por lo general roquerios, y son recientemente inutiles y obsoletos.
Razon por la cual logicamente podria pensarse que deberian ser eliminados, y aunque se han resistido a desaparecer, lo iran haciendo poco a poco, a menos que comiencen a considerarse patrimonio historico mundial.
Y dudo que lo hagan.
Sea como sea, parti al faro de La Serena con la mas grande de todas las ilusiones, motivos a los cuales ya me he referido, y al llegar, me encuentro con la mas absurda y enorme de todas las desiluciones.
Una mole enorme de concreto viejo, mal pintado, gastado, rayado completamente, descascarado, derrumbado y a punto de desplomarse.
Si lo van a tener asi, mejor lo echan abajo, porque es una verdadera verguenza. Es el emblema de la ciudad, y ahora es cuna de delincuentes y marginales.
Una pena.
Pero esta en la playa, en la arena. Asi que antes de que saliera el sol, ya estabamos tirados de espalda al cielo, mojados como asnos por la bruma marina matinal, el aire salado, y ese frio costero del norte, que porfiado como el mismo, se introduce por los poros y te congela el centro de los huesos.
Algo asi.
Despues de la deprimente realidad, se presento ante nosotros una duda aun mayor que la anterior, porque ahora si que no teniamos nada que hacer. Era domingo, eran las 6 y media de la mañana, y nada de nada, habia que pudieramos hacer.
Bueno, la imaginacion es grande... asi que caminamos de vuelta, los 3 kilometros que nos separaban del terminal de buses, donde dejamos los bolsos, y armados solo con la camara y un gas paralizante de defensa personal, salimos a recorrer la en ese entonces, desconocida y fantastica ciudad de la serena.
Desilucionados por la aventura del faro, nos pusimos a caminar por la ciudad, y lo que encontramos nos dejo babosos y recalcitrantes.
Callecitas de puerto, silenciosas y limpias. Una calma que viajaba con nosotros a la vuelta cada esquina, mientras las sombras que fueron hace minutos alargadas, se convierten en colores y formas fantasticas.
Casitas blancas bien definidas, con su cultura propia y una identidad unica que las hacia diferentes de todas las demas, pero a la vez iguales a todas, por compartir ese fabuloso legado de pertenecer a esa ciudad.
Un fabuloso legado.
Pasaron las horas, y nosotros pasamos con ellas. Llego el hambre, y contentos la combatimos, recorrimos calles, pasajes, lugares, museos y centros comerciales. Buscamos alojamiento y cuando una casa nos parecia bonita, nos invitaban entrar para conocerla.
¿Quien dijo que la gente del norte era poco amigable?
Dormimos tirados en el pasto de una plaza, devorados por las hormigas, esperando una banda callejera que nunca se presento, caminamos, caminamos, y seguimos caminando, y cuando terminamos de caminarlo todo, volvimos a caminarlo todo otra vez.
Todo con la desinteresada y sincera ayuda de cristobal, mi gps. Que maravilla es la tecnologia que nos facilito tan fastanticamente todas las cosas.
Cuando encontrabamos algo que nos parecia interesante, marcabamos el punto, y luego para volver al lugar, el aparatito nos guiaba por las desconocidas y reconditos vericuetos de una ciudad anonima y completamente ajena.
Llego la tarde, con ella el sabor eterno de un atardecer marino, las personas que se retiraban ya a sus casas, y nosotros sin todavia lugar para alojar. Sentados al frente del mar nos despreocupabamos de la inevitable preocupacion de encontrar alojamiento.
Pero este mundo cruel, de tan cruel que es, es hermoso y bondadoso al mismo tiempo, nos entrego todo resuelto para que no tuvieramos que preocuparnos de nada.
Mi primo nos fue a buscar para que fueramos a dormir a la casa de mi tia. Hay veces que uno se preocupa por tonteras que no valen la pena y es porque muchas veces uno olvida que esta rodeado de personas hermosas que te solucionan los problemas, muchas veces sin haber pedido nada. Que alegria saber que estamos rodeados de personas de buen corazon.
Fue un dia muy feliz.
En un cafe, de los muchos cafes que hay en el mundo, en una ciudad, de las muchas ciudades que hay en el mundo, escribo estas lineas... para ti.
:: a las 9:42 p. m., fueron palabras lanzadas a los vientos por Alvaro Roman!!!
_
martes, enero 23
Realidad surreal acerca del viaje...
Nos costo, pero iniciamos el viaje.
Inicialmente, el viaje partia el lunes 15 de enero, pero las circunstancias inevitables de un futuro sin precedentes, hicieron postergar y postergar el viaje en forma permanente e indefinida.
Sea como sea, la fecha limite del encuentro con lo inevitable, se dio para el viernes algo. Y digo algo, porque ya no se, ni quiero acordarme de la fecha.
Alojamos en la casa de poroto el jueves en la noche, para poder salir tempranisimo en la mañana a hacer la tan venturosa y siempre carente de probabilidad, la mal llamada maniobra: Autostop o hacer dedo como decimos los chilenos.
En consecuencia, el infalible plan para salir temprano, obviamente debia fallar, y como no podiamos fallar en nuestra falla, fallamos, obvio.
O sea, salimos a la hora del loly... que es bastante tarde. Algo asi como despues de almuerzo. Caminamos los dos kilometros que nos separan de la ruta 5, y una vez ahi, nos separamos por primera vez de nuestras mochilas y al primer auto, paramos el dedo.
Anyway como dicen en otros paises, lo primero que paro, y despues de bastante rato, fue un bus que nos llevo directamente a un lugar bastante propicio para la maniobra "dedo". Viajamos 10 minutos y nos bajamos para volver al "dedo".
Y estuvimos ahi horas. Varias, muchas, demasiadas. Nadie lleva, nadie nada, todos pasan, nadie para. El desanimo se apodero de nosotros y con el desanimo, tambien la desesperanza. No teniamos ni fuerzas para levantar la mano. Hacia un calor impresionante.
Ya iban varias horas, muchas, demasiadas, cuando derrepente, alla a lo lejos, un jeep habia parado. Al principio no lo creimos y ni siquiera tomamos las mochilas. No las tomamos hasta que el jeep empezo a retroceder y se paro al lado de nosotros. Ahi recien caimos que la situacion era real, y le preguntamos timidamente por la ventana que llevaba abajo...
... nos va a llevaaaar??
Y despues de las presentaciones formales, nos montamos arriba con nuestras mochilas y todo. Resulto ser un marino, que llevaba un viaje conduciendo mas de 3 mil kilometros desde la ciudad mas austral de Chile. Iba aburridisimo, asi que no encontro mejor forma de entretenerse, que subir dos mochileros mas aburridos que el mismo.
Todos deseosos de viajar y conversar.
Como las cosas no son maravillosas, nos dejo en Los Angeles... a 150 kilometros de mi casa... 150 kilometros que no hubieramos recorrido de otra forma.
Un buen tipo.
Y de nuevo la funcia inutil de pararle el dedo a todos los babosos. Para que vamos a perder tiempo en decir que perdimos todo el tiempo parando dedos a todos los babosos. Sea como sea, impresionantemente, tuvimos la increible suerte de ser recibidos como pasajeros en el peor desastre de la historia automotriz.
Un camion utilitario.
Y para colmo, en la parte trasera, donde se escuchaban seguramente los mismos ruidos que algun dia fueron grabados directamente desde el infierno. Nos guste o no, nos estabamos moviendo, y no nos falto, ni sobro tiempo para reirnos en nuestra cara de nuestra humilde miseria.
Y nos guste o no tambien, el viaje duro menos de lo que dura un politico en el purgatorio. Tuvimos que bajarnos, y en ese momento no hubo nada mas que hacer.
Hicimos de todo, incluso aquello para que un auto se detuviera, pero no hubo forma, no hubo manera, perdimos las esperanzas, y junto con ellas los ultimos rayos solares del dia que ya terminaba.
Nos resignamos a nuestro destino fatal, y asumiamos que no ibamos a llegar a La Serena en un solo dia. Asi que armados esta vez, y nuevamente con un nuevo animo, nos dispusimos a buscar el lugar perfecto para plantar nuestra carpa.
No fue dificil, arboles, estrellas, pasto y muchos caballos hacen la diferencia. Pasamos la noche entera escuchando rugir los camiones por la carretera, mientras pasaban feroces y fulgurantes para reencontrarse una vez mas con sus inciertos destinos.
La naturaleza del aburrimiento y el proposito del viaje nos hicieron entretenernos bastante con los juegos de luces que se ven todos los dias en una carretera mal iluminada con gigantes camiones que la curzan veloces. Y de entre muchas fotografias que tomamos, hay algunas que representan la mas cruda desesperacion mas fuertemente que otras...
... aunque a esa hora ya todo volvia a ser alegrias.
Como dato curioso, nuestro principal problema radicaba en la obtencion del vital elemento hidrico, y nos dirigimos a una estacion gasolinera para conseguirla. Grande fue nuestra sorpresa, que al llegar nosotros, la encontramos completamente abandonada.
Sin luces, sin gente, sin nadie. Era la inspiracion perfecta para el rodaje de una excelente pelicula de terror, donde dos inocentes pero valientes y aguerridos jovenes, sufren una muerte horrible, a manos del asesino del algodon de azucar.
O una tontera como esa.
Nos metimos adonde pudimos, gritamos, llamamos, y golpeamos, pero no hubo caso, nadie respondio. Y no hubiesemos seguido llamando, si no hubiesemos tenido la certeza que habia alguien, porque habia un auto en un lugar donde no debia haber ninguno... en el caso de que no hubiese alguien.
Y despues de un rato, se prendio una luz, algo asi como la escotilla de Lost, y se abrio una puerta. Partimos inmediatamente para entablar comunicacion, y desde la puerta, oimos una voz muy chillona de una mujer que gritaba que pasa.
Y la vimos, una gorda bien gruesa salio de la puerta, y se quedo mirandonos como si fueramos marcianos. Le alcanzamos a preguntar si tenia agua, y nos dijo que ahi no habia nada de nada. Misteriosa la gorda, como si hubiese estado escondida... me imagino que estaba viviendo en la estacion abandonada...
Conseguimos agua en un peaje, y despues de sacar miles de fotos mas, nos pusimos a dormir.
Al otro dia comprendimos despues de varios intentos vanos, que no ibamos a llegar asi como asi a La Serena, y caimos en la endemoniada tentacion de pagar un pasaje. No habia otra salida, estabamos al borde de la mas endemoniada de las insolaciones y no habia un solo lugar para esconderse de ese endiablado sol.
Pasaban y pasaban miles de auto, y pasaban nada mas. Cuando el agua de las botellas se puso tan caliente como para hacer un buen cafe, comprendimos que no habia mas que hacer. Era quedarse y morir, o pagar un bus y partir.
Como podras comprobar, seguimos vivos, asi que te imaginaras que fue lo que hicimos. No nos resignabamos todavia a llegar a La Serena en bus, porque teniamos la vana esperanza de que alguien de buena voluntad nos llevara.
... asi que nos bajamos.
Y a la hora despues volvimos a tomar otro bus. Y asi sucesivamente nos bajamos y subimos a buses varias veces... nos salio carisimo. Estupidos, como gastamos plata por las puras. Sea como sea, tomamos el bus final que nos llevo a santiago, nuestra capital, y ahi fue un mero tramite bajarse de un bus para subirse a otro.
Resumiendo, el pasaje nos salio carisimo. Con esto de las vacaciones y el cambio de temporada, los pasajes estan ultra caros. Con el puro pasaje desde Santiago a La Serena, estuve con diarrea como 4 horas.
Compramos el pasaje mas barato que pudimso encontrar, en los buses mas indecentes que fuera posible, y al momento de ver la chatarra en la que ibamos a viajar, quedamos con la boca requetebien abierta: Un bus fantastico, con todo lo necesario para viajar de lujo, con asientos de cuero incluidos. Yo el estupido, pensando que nos ibamos a subir en una chatarra, pedi los asientos del medio, porque al final siempre esta el baño, y ni ahi con andar oliendo cacas ajenas. Pero cuando llegamos, nos dimos cuenta que el mismo baño estaba al medio, asi que nos tuvimos que mamar todas las fragancias anales de los pasajeros durante 6 horas seguidas.
Sea como sea, el bus partia a las 11 de la noche, y en Santiago hacia un calor atroz, razon por la cual es innecesario y absolutamente absurdo andar abrigado. Entonces guiandonos por la logica, metimos nuestros bolsos en la zona de carga, y partio el bus.
Y cuando partio, pensamos que a pesar de que estabamos vestidos como para ir a la playa, con las frazadas del bus quedariamos bastante bien. Le preguntamos al hombre de los pasajes.
- Frazadas? Cuales frazadas?
Suficiente. Tendriamos que arreglarnolas por nosotros mismos. Eramos fuertes, valientes y jovenes, podiamos arreglarnos contra el frio, el olor a caca y el aire acondicionado.
Nos matamos de frio.
Poroto trato de dormir, pero yo no hice ni el intento. No hubo caso. Me meti las manos debajo de la polera, y me acurruque como lo haria un chanchito de tierra. No hubo caso, el frio era mas fuerte.
Despues de 6 horribles y catastroficas horas, a las 6 de la mañana podiamos decir por fin...
... llegamos a La Serena ( ahi ya se notan las palmeras )
Inicialmente, el viaje partia el lunes 15 de enero, pero las circunstancias inevitables de un futuro sin precedentes, hicieron postergar y postergar el viaje en forma permanente e indefinida.
Sea como sea, la fecha limite del encuentro con lo inevitable, se dio para el viernes algo. Y digo algo, porque ya no se, ni quiero acordarme de la fecha.
Alojamos en la casa de poroto el jueves en la noche, para poder salir tempranisimo en la mañana a hacer la tan venturosa y siempre carente de probabilidad, la mal llamada maniobra: Autostop o hacer dedo como decimos los chilenos.
En consecuencia, el infalible plan para salir temprano, obviamente debia fallar, y como no podiamos fallar en nuestra falla, fallamos, obvio.
O sea, salimos a la hora del loly... que es bastante tarde. Algo asi como despues de almuerzo. Caminamos los dos kilometros que nos separan de la ruta 5, y una vez ahi, nos separamos por primera vez de nuestras mochilas y al primer auto, paramos el dedo.
Anyway como dicen en otros paises, lo primero que paro, y despues de bastante rato, fue un bus que nos llevo directamente a un lugar bastante propicio para la maniobra "dedo". Viajamos 10 minutos y nos bajamos para volver al "dedo".
Y estuvimos ahi horas. Varias, muchas, demasiadas. Nadie lleva, nadie nada, todos pasan, nadie para. El desanimo se apodero de nosotros y con el desanimo, tambien la desesperanza. No teniamos ni fuerzas para levantar la mano. Hacia un calor impresionante.
Ya iban varias horas, muchas, demasiadas, cuando derrepente, alla a lo lejos, un jeep habia parado. Al principio no lo creimos y ni siquiera tomamos las mochilas. No las tomamos hasta que el jeep empezo a retroceder y se paro al lado de nosotros. Ahi recien caimos que la situacion era real, y le preguntamos timidamente por la ventana que llevaba abajo...
... nos va a llevaaaar??
Y despues de las presentaciones formales, nos montamos arriba con nuestras mochilas y todo. Resulto ser un marino, que llevaba un viaje conduciendo mas de 3 mil kilometros desde la ciudad mas austral de Chile. Iba aburridisimo, asi que no encontro mejor forma de entretenerse, que subir dos mochileros mas aburridos que el mismo.
Todos deseosos de viajar y conversar.
Como las cosas no son maravillosas, nos dejo en Los Angeles... a 150 kilometros de mi casa... 150 kilometros que no hubieramos recorrido de otra forma.
Un buen tipo.
Y de nuevo la funcia inutil de pararle el dedo a todos los babosos. Para que vamos a perder tiempo en decir que perdimos todo el tiempo parando dedos a todos los babosos. Sea como sea, impresionantemente, tuvimos la increible suerte de ser recibidos como pasajeros en el peor desastre de la historia automotriz.
Un camion utilitario.
Y para colmo, en la parte trasera, donde se escuchaban seguramente los mismos ruidos que algun dia fueron grabados directamente desde el infierno. Nos guste o no, nos estabamos moviendo, y no nos falto, ni sobro tiempo para reirnos en nuestra cara de nuestra humilde miseria.
Y nos guste o no tambien, el viaje duro menos de lo que dura un politico en el purgatorio. Tuvimos que bajarnos, y en ese momento no hubo nada mas que hacer.
Hicimos de todo, incluso aquello para que un auto se detuviera, pero no hubo forma, no hubo manera, perdimos las esperanzas, y junto con ellas los ultimos rayos solares del dia que ya terminaba.
Nos resignamos a nuestro destino fatal, y asumiamos que no ibamos a llegar a La Serena en un solo dia. Asi que armados esta vez, y nuevamente con un nuevo animo, nos dispusimos a buscar el lugar perfecto para plantar nuestra carpa.
No fue dificil, arboles, estrellas, pasto y muchos caballos hacen la diferencia. Pasamos la noche entera escuchando rugir los camiones por la carretera, mientras pasaban feroces y fulgurantes para reencontrarse una vez mas con sus inciertos destinos.
La naturaleza del aburrimiento y el proposito del viaje nos hicieron entretenernos bastante con los juegos de luces que se ven todos los dias en una carretera mal iluminada con gigantes camiones que la curzan veloces. Y de entre muchas fotografias que tomamos, hay algunas que representan la mas cruda desesperacion mas fuertemente que otras...
... aunque a esa hora ya todo volvia a ser alegrias.
Como dato curioso, nuestro principal problema radicaba en la obtencion del vital elemento hidrico, y nos dirigimos a una estacion gasolinera para conseguirla. Grande fue nuestra sorpresa, que al llegar nosotros, la encontramos completamente abandonada.
Sin luces, sin gente, sin nadie. Era la inspiracion perfecta para el rodaje de una excelente pelicula de terror, donde dos inocentes pero valientes y aguerridos jovenes, sufren una muerte horrible, a manos del asesino del algodon de azucar.
O una tontera como esa.
Nos metimos adonde pudimos, gritamos, llamamos, y golpeamos, pero no hubo caso, nadie respondio. Y no hubiesemos seguido llamando, si no hubiesemos tenido la certeza que habia alguien, porque habia un auto en un lugar donde no debia haber ninguno... en el caso de que no hubiese alguien.
Y despues de un rato, se prendio una luz, algo asi como la escotilla de Lost, y se abrio una puerta. Partimos inmediatamente para entablar comunicacion, y desde la puerta, oimos una voz muy chillona de una mujer que gritaba que pasa.
Y la vimos, una gorda bien gruesa salio de la puerta, y se quedo mirandonos como si fueramos marcianos. Le alcanzamos a preguntar si tenia agua, y nos dijo que ahi no habia nada de nada. Misteriosa la gorda, como si hubiese estado escondida... me imagino que estaba viviendo en la estacion abandonada...
Conseguimos agua en un peaje, y despues de sacar miles de fotos mas, nos pusimos a dormir.
Al otro dia comprendimos despues de varios intentos vanos, que no ibamos a llegar asi como asi a La Serena, y caimos en la endemoniada tentacion de pagar un pasaje. No habia otra salida, estabamos al borde de la mas endemoniada de las insolaciones y no habia un solo lugar para esconderse de ese endiablado sol.
Pasaban y pasaban miles de auto, y pasaban nada mas. Cuando el agua de las botellas se puso tan caliente como para hacer un buen cafe, comprendimos que no habia mas que hacer. Era quedarse y morir, o pagar un bus y partir.
Como podras comprobar, seguimos vivos, asi que te imaginaras que fue lo que hicimos. No nos resignabamos todavia a llegar a La Serena en bus, porque teniamos la vana esperanza de que alguien de buena voluntad nos llevara.
... asi que nos bajamos.
Y a la hora despues volvimos a tomar otro bus. Y asi sucesivamente nos bajamos y subimos a buses varias veces... nos salio carisimo. Estupidos, como gastamos plata por las puras. Sea como sea, tomamos el bus final que nos llevo a santiago, nuestra capital, y ahi fue un mero tramite bajarse de un bus para subirse a otro.
Resumiendo, el pasaje nos salio carisimo. Con esto de las vacaciones y el cambio de temporada, los pasajes estan ultra caros. Con el puro pasaje desde Santiago a La Serena, estuve con diarrea como 4 horas.
Compramos el pasaje mas barato que pudimso encontrar, en los buses mas indecentes que fuera posible, y al momento de ver la chatarra en la que ibamos a viajar, quedamos con la boca requetebien abierta: Un bus fantastico, con todo lo necesario para viajar de lujo, con asientos de cuero incluidos. Yo el estupido, pensando que nos ibamos a subir en una chatarra, pedi los asientos del medio, porque al final siempre esta el baño, y ni ahi con andar oliendo cacas ajenas. Pero cuando llegamos, nos dimos cuenta que el mismo baño estaba al medio, asi que nos tuvimos que mamar todas las fragancias anales de los pasajeros durante 6 horas seguidas.
Sea como sea, el bus partia a las 11 de la noche, y en Santiago hacia un calor atroz, razon por la cual es innecesario y absolutamente absurdo andar abrigado. Entonces guiandonos por la logica, metimos nuestros bolsos en la zona de carga, y partio el bus.
Y cuando partio, pensamos que a pesar de que estabamos vestidos como para ir a la playa, con las frazadas del bus quedariamos bastante bien. Le preguntamos al hombre de los pasajes.
- Frazadas? Cuales frazadas?
Suficiente. Tendriamos que arreglarnolas por nosotros mismos. Eramos fuertes, valientes y jovenes, podiamos arreglarnos contra el frio, el olor a caca y el aire acondicionado.
Nos matamos de frio.
Poroto trato de dormir, pero yo no hice ni el intento. No hubo caso. Me meti las manos debajo de la polera, y me acurruque como lo haria un chanchito de tierra. No hubo caso, el frio era mas fuerte.
Despues de 6 horribles y catastroficas horas, a las 6 de la mañana podiamos decir por fin...
... llegamos a La Serena ( ahi ya se notan las palmeras )
En un cafe, de los muchos cafes que hay en el mundo, en una ciudad, de las muchas ciudades que hay en el mundo, escribo estas lineas... para ti.
:: a las 10:50 p. m., fueron palabras lanzadas a los vientos por Alvaro Roman!!!
_
lunes, enero 22
Ay Caray...!!
Fantasticidades metafisicas de la comicidad marciana.
En este momento me encuentro sentado al frente de un computador, igual que tu. Pero por la ventana entra aire, igual que tu. Este aire es salado... el tuyo igual?
Y al fondo se ve el mar... Un mar absolutamente inmenso y enormemente azul y profundo. El oceano pacifico.
Esta de noche, y solo se ven las olas reventando alla abajo, iluminadas por millones de luces de esta ciudad fantastica. A lo lejos, en una peninsula se ve lo que queda de un fuerte, rodeado por infinitas luces de una ciudad tan cercana como distante.
Todo es magico, todo es absurdo, todo es fantastico.
Es increible estar aca, y sentir, mas que entender, todas las cosas que he visto.
Ahora no tengo tiempo, pero ya contare detalles de esta asombrosa aventura.
Hoy, las noches de serena, y mañana... las noches del valle.
Saludos a todos.
En este momento me encuentro sentado al frente de un computador, igual que tu. Pero por la ventana entra aire, igual que tu. Este aire es salado... el tuyo igual?
Y al fondo se ve el mar... Un mar absolutamente inmenso y enormemente azul y profundo. El oceano pacifico.
Esta de noche, y solo se ven las olas reventando alla abajo, iluminadas por millones de luces de esta ciudad fantastica. A lo lejos, en una peninsula se ve lo que queda de un fuerte, rodeado por infinitas luces de una ciudad tan cercana como distante.
Todo es magico, todo es absurdo, todo es fantastico.
Es increible estar aca, y sentir, mas que entender, todas las cosas que he visto.
Ahora no tengo tiempo, pero ya contare detalles de esta asombrosa aventura.
Hoy, las noches de serena, y mañana... las noches del valle.
Saludos a todos.
En un cafe, de los muchos cafes que hay en el mundo, en una ciudad, de las muchas ciudades que hay en el mundo, escribo estas lineas... para ti.
:: a las 10:23 p. m., fueron palabras lanzadas a los vientos por Alvaro Roman!!!
_
jueves, enero 18
Nose de que escribir...
Pero resumidas cuentas, ya me voy mañana.
Aqui al lado de mi computador hay...
Una camara lista, con su estuche incluido, o incluida en su estuche, da lo mismo. Un cuchillo preparado, listo y afilado para cualquier situacion, una luz de minero, de esas que se usan en el casco, una cortaplumas de esas que hacen de todo y mucho mas, 5 pares de pilas o baterias, su cargador, la bateria extra de mi camara, su cargador, un parasol para el lente, un cable usb, una caja dvd con un cd y un dvd para respaldar mis fotos en el camino, un bolso y mi gps.
Casi todo lo necesario para cruzar el congo a pie.
Esta todo bien, tengo ganas de salir... hace tanto tiempo que no salgo. No incluyo como salida mi viaje a estados unidos, porque no fue un viaje de descanzo, aunque lo haya incluido.
Este es uno de esos viejos viajes que uno hacia cuando era chico, donde no habian preocupaciones, ni de tiempo, ni de espacio, ni dinero.
Es dificil hacer estas cosas hoy en dia.
Este es un reencuentro con mi infancia.
Aqui al lado de mi computador hay...
Una camara lista, con su estuche incluido, o incluida en su estuche, da lo mismo. Un cuchillo preparado, listo y afilado para cualquier situacion, una luz de minero, de esas que se usan en el casco, una cortaplumas de esas que hacen de todo y mucho mas, 5 pares de pilas o baterias, su cargador, la bateria extra de mi camara, su cargador, un parasol para el lente, un cable usb, una caja dvd con un cd y un dvd para respaldar mis fotos en el camino, un bolso y mi gps.
Casi todo lo necesario para cruzar el congo a pie.
Esta todo bien, tengo ganas de salir... hace tanto tiempo que no salgo. No incluyo como salida mi viaje a estados unidos, porque no fue un viaje de descanzo, aunque lo haya incluido.
Este es uno de esos viejos viajes que uno hacia cuando era chico, donde no habian preocupaciones, ni de tiempo, ni de espacio, ni dinero.
Es dificil hacer estas cosas hoy en dia.
Este es un reencuentro con mi infancia.
En un cafe, de los muchos cafes que hay en el mundo, en una ciudad, de las muchas ciudades que hay en el mundo, escribo estas lineas... para ti.
:: a las 2:05 p. m., fueron palabras lanzadas a los vientos por Alvaro Roman!!!
_
lunes, enero 15
Sobre guerras y estupideces varias.
Ahora ultimo he tenido la oportunidad de compartir con muchisimos argentinos, y curiosa experiencia es encontrarme con personas que fantasticamente te parecen en extremo agradables.
Curioso dato es el que hace unos años estuvimos ( y seguimos estando ) a punto de repartirnos balazos.
Que estupidas son las guerras...
Alguien dijo por ahi, que si alguien quiere robarte algo, mejor se lo regalas, y asi nadie podra quitarte nada.
Pero en este caso... con que nos quedariamos nosotros?!
Un abrazo argentino.
Curioso dato es el que hace unos años estuvimos ( y seguimos estando ) a punto de repartirnos balazos.
Que estupidas son las guerras...
Alguien dijo por ahi, que si alguien quiere robarte algo, mejor se lo regalas, y asi nadie podra quitarte nada.
Pero en este caso... con que nos quedariamos nosotros?!
Un abrazo argentino.
En un cafe, de los muchos cafes que hay en el mundo, en una ciudad, de las muchas ciudades que hay en el mundo, escribo estas lineas... para ti.
:: a las 12:31 a. m., fueron palabras lanzadas a los vientos por Alvaro Roman!!!
_
Ya, se acabo.
Deje el trabajo, y no fue para nada alegrias.
Pensaba que iba a ser mas facil, pero me impresione encontramre muerto de pena dejando algo que en el fondo, me gustaba hacer. Estaba claro, sacrifique todos mis findesemanas, mis horas de descanzo, los viajes con mis amigos, horas importantisimas de estudio, dormir hasta tarde los domingos, las comidas familiares, los cumpleaños de mis amigos, ser el ultimo que llega a la navidad, ser el ultimo que llega al año nuevo, el ultimo que se acuesta y el primero que se levanta...
... y tantas miles de cosas mas.
Pero me encariñe. Me encariñe de todas esas fabulosas personas que trabajaban conmigo y que sacrificaban lo mismo que yo. Con ellos, pasabamos horas esperando terminar para poder volver con nuestras familias. Con ellos nos apoyabamos cuando algo estaba mal, y nos reiamos cuando algo estaba bien.
Con ellos comparti todos los findesemanas de los dos ultimos años de mi vida.
Fue una experiencia fantastica haberlos conocido. Ahora yo estoy aqui, pensando en los que deje, y pienso que en realidad nadie quedo atras, todos siguen aqui alimentando mi corazon.
Ahora se vienen cosas dificiles, ahora me va a tocar hacer lo que en realidad me gusta, y me las tengo que arreglar para que me paguen por ello. Ahora tengo que arreglarmelas.
Ahora es cuando se corren los riesgos, cuando lo dejo todo botado para valermelas por mi mismo, y me encanta.
Es raro pensar que ahora nada es seguro, que todo depende de mi, y que en mis manos esta la posibilidad de que me vaya bien.
Y si me va mal, aun puedo darme ese lujo, aun soy joven, no tengo hijos, y todavia soy un estudiante. Todos mis errores me afectaran solo a mi, y nadie mas sufrira las consecuencias.
Tengo el absoluto derecho a equivocarme...
... aunque vamos a tratar de que eso no suceda.
Vamos a ver que pasa.
Pensaba que iba a ser mas facil, pero me impresione encontramre muerto de pena dejando algo que en el fondo, me gustaba hacer. Estaba claro, sacrifique todos mis findesemanas, mis horas de descanzo, los viajes con mis amigos, horas importantisimas de estudio, dormir hasta tarde los domingos, las comidas familiares, los cumpleaños de mis amigos, ser el ultimo que llega a la navidad, ser el ultimo que llega al año nuevo, el ultimo que se acuesta y el primero que se levanta...
... y tantas miles de cosas mas.
Pero me encariñe. Me encariñe de todas esas fabulosas personas que trabajaban conmigo y que sacrificaban lo mismo que yo. Con ellos, pasabamos horas esperando terminar para poder volver con nuestras familias. Con ellos nos apoyabamos cuando algo estaba mal, y nos reiamos cuando algo estaba bien.
Con ellos comparti todos los findesemanas de los dos ultimos años de mi vida.
Fue una experiencia fantastica haberlos conocido. Ahora yo estoy aqui, pensando en los que deje, y pienso que en realidad nadie quedo atras, todos siguen aqui alimentando mi corazon.
Ahora se vienen cosas dificiles, ahora me va a tocar hacer lo que en realidad me gusta, y me las tengo que arreglar para que me paguen por ello. Ahora tengo que arreglarmelas.
Ahora es cuando se corren los riesgos, cuando lo dejo todo botado para valermelas por mi mismo, y me encanta.
Es raro pensar que ahora nada es seguro, que todo depende de mi, y que en mis manos esta la posibilidad de que me vaya bien.
Y si me va mal, aun puedo darme ese lujo, aun soy joven, no tengo hijos, y todavia soy un estudiante. Todos mis errores me afectaran solo a mi, y nadie mas sufrira las consecuencias.
Tengo el absoluto derecho a equivocarme...
... aunque vamos a tratar de que eso no suceda.
Vamos a ver que pasa.
En un cafe, de los muchos cafes que hay en el mundo, en una ciudad, de las muchas ciudades que hay en el mundo, escribo estas lineas... para ti.
:: a las 12:15 a. m., fueron palabras lanzadas a los vientos por Alvaro Roman!!!
_