Las increibles aventuras de marcianito luminoso!

Se fue el coke y nos quedamos solos.

Nos quedamos solos y habia que pagar la casa.

Habia que pagar la casa y necesitabamos mas gente.

Se fueron a vivir con nosotros tres brasileros: Nenei, michelle, y no me acuerdo del otro.

Sea como sea, se fueron a vivir con nosotros y todo resulto de pelos. Derrepente nosotros los chilenos, ojala fueramos como los brasileros. Nose, se siente que es distinto.

De todas maneras, me quedaban como tres dias viviendo ahi porque ya habia llegado mi fecha de partida y no fueron muchas las interacciones sociales que estabamos recien aflorando.

Solo que un dia, estos muchachos nos preguntan si queremos acompañarlos a dejar al que no me acuerdo como se llamaba a chicago.

A CHICAGO Y GRATIS!

Y partimos, tempranito... justo con la salida del sol.

Nos fuimos por la I-94 a Milwaukee, y cuando llegamos alla, nos fuimos bordeando el lago michigan hasta llegar a Chicago.

Y la entrada a chicago, es igual a la entrada de Futurama... todo el mundo dice lo mismo!



Y una vez alla en el fondo, enderezar las cabezas y empezar a mirar para arriba.

Chicago es la ciudad mas fantastica de todas las ciudades fantasticas que hubiese imaginado alguna vez mientras dormia.

Y no soy solo yo, muchas personas que conocen nueva york o los angeles dicen lo mismo.

Es una ciudad super bien hecha, construida para agradar, incluso la gente. Los que viven alla, dicen que jamas la conoceran completamente, porque todos los dias hay algo que no estaba, y dejo de estar algo que siempre estuvo ahi.

Es excesivamente dinamica.

Lo incluye todo, y para todos. Tiene cafeterias de todos los estilos, discos, restaurants de todas las nacionalidades, musica en vivo de cualquier cosa, con los musicos de la mejor calidad, todo esta ahi.

Y nosotros queriamos conocerlo todo.

Ahi estuvo el problema.

El principal problema fue entrar... porque tu te imaginas que vas por una carretera y de la nada apareces en el centro?

Mentira!!!

Tienes que dar vuelta un mapa mi doscientas veces, antes de encontrar la salida 91 que te lleva a la avenida pedrito, y de la avenida pedrito tienes que seguir tanteando las calles desconocidas a ver si das con la avenida jorgito.

Y todo eso, en un trafico atroz.

A menos que tengas un gps, como yo.

Pero aunque tengas un gps, tienen que hacerte caso, porque si no, da lo mismo. Ellos sabian que teniamos que llegar a la orilla del lago michigan, pero la flechita del gps decia que ese lago lo teniamos en la espalda y que nos estabamos alejando cada vez mas.

Y no me querian hacer caso.

Despues de un ratazo recien nos dimos la vuelta y bienvenidos, estamos en Chicago.

Y ahora que!

Ese es un problema cuando estas en una ciudad grande porque no tienes idea por donde empezar, asi que elegimos un buen comienzo... comiendo.

A donde...? A un Mc Donalds, obvio. Recorres la mitad del mundo para ir a comer lo mismo que comias en el mundo que habias dejado atras... solo que mucho mas caro.

El principal problema de Chicago es uno y ningun otro que con cuanta vaselina, y por que orificio de tu cuerpo te introduces el auto.

Porque estacionar un auto alla, es recontraultramegaarchisupercircumbirumbicamente caro.

No, no es tan caro en realidad, pero se nota cuando nadie tiene plata. La cosa es que decidimos dejar el auto en un estacionamiento super bacan y nos estacionamos en el piso de Frank Sinatra. Eran como 8 pisos de estacionamientos, y cada piso tiene su cantante y ahi se escuchan sus canciones todo el dia.

Nos quedamos en el de Frank Sinatra, a pesar de que yo queria el de Bob Dylan.

Dejamos el auto ahi, y nos fuimos a caminar, a ver que podiamos hacer y de tantas cosas que podiamos, al final no hicimos nada.



Paseamos por las calles, las tiendas, fuimos a ver los edificios, y luego a la plataforma del cielo.

El skydeck de la Torre Sears... el edificio mas alto de Estados Unidos... bueno, mas alto desde que un piloto se estaba abrochando un zapato y se mando un trancacazo con la torre uno, y otro piloto que pasaba mirando como se caia la torre, se mando el pencazo con la torre dos.

Instantaneamente la torre sears se convirtio en el edificio mas alto de los US.

No llegamos a la azotea, obvio. No habia tiempo para eso, porque teniamos que hacer
lo que se supone que fuimos a hacer:

Ver un partido de los Chicago Bulls en el estadio Michael Jordan.

El principal problema fue encontrar el estadio y una vez encontrado, pagar un carisimo estacionamiento para que una horda infeliz de negros enormes, no te deje el auto sin ruedas y montado en ladrillitos.

Y una vez superado ese drama, partir al famoso estadio.

Ahi habia una estatua tamaño real de Michael Jordan en su salto tan famoso con la pelota en la mano. Puta que es grande el huevon.

No le saque foto, porque me dieron susto los negros.

Llegamos a la boleteria con la plata en la caja fuerte, y nos conto el baboso que todas las entradas estaban agotadas.

Inmediatamente aparecieron por atras dos o tres babosos amablemente ofreciendonos entradas.

- Cuanto?
- 180 dolares.

Esos son 90 lucas.

Lo mandamos al carajo y luego de unas vueltas locas por la ciudad, nos fuimos a chingar a nuestra madre buscando la salida y felices pero desanimados por no haber echo nada, nos volvimos a Wisconsin.

Adios chicago, See you later.

En un cafe, de los muchos cafes que hay en el mundo, en una ciudad, de las muchas ciudades que hay en el mundo, escribo estas lineas... para ti.