Las increibles aventuras de marcianito luminoso!

sábado, enero 21

Hoy empezo a nevar de nuevo!

Hoy que dia es... viernes?

Creo que si... y los viernes nos pagan. Asi que despues del ajetreado dia anterior, nos levantamos con hartas ganas para ir a cobrar nuestros cheques.

Claro, ahi estabamos todos los pelotudos con cara de suenio levantandonos, y derrepente miro por la ventana, y el cielo escupia montones de peluzas blancas, suavemente, como una guerra cosmica de almohadas miniaturas.

Estaba empezando a nevar!

Y yo, no cabia en mi felicidad. Nos arreglamos, y partimos. Y cuando partimos, la nieve ya lo habia cubierto todo, y nevaba ahora con furia.

Furia es una palabra grande, pero nevaba harto...

Asi que partimos entremedio de un viento blanco que se caia del cielo... todo estaba terriblemente blanco, fue una cosa fantastica.

Llegamos a la fabrica, le arrebatamos nuestros cheques al baboso ese, y partimos al banco del walmart a cambiarlos...

450 dolares por un par de dias de trabajo... eso es bueno.

Asi que aprovechamos que estabamos ahi, y nos dedicamos a comprar todas las cosas que necesitabamos para la semana. Andre se compro una camara, asi que ahora estamos sacando fotos de mejor calidad.

Nos vinimos a la casa, y descubrimos algo espantoso...

- La van no se la puede en las subidas con nieve.

Asi que tenemos que hacer magia para poder salir de algun lado o entrar a otro.

Llegamos a la casa, y nos encontramos con esto.



Ya no nevaba tanto, pero igual la nieve que cayo, sirve para cubrir el suelo por varios dias. Hace frio, pero no tanto, pero tampoco el calor necesario para derretir la nieve.

Despues de comer y algunas cervezas, decidimos salir a dar una vuelta y nos paseamos por todo dells...

Fuimos al marleys, nada, vacio... al kahuna... lo mismo... a las casas de los amigos a ver si podiamos molestarlos, tampoco, nada.

Y en eso... en una bajada bieen pronunciada, el nico que estaba manejando, dice con una absurda calma:

- Eh... cabros, no tengo frenos.

Y la van bajaba y bajaba por la pendiente con las cuatro ruedas detenidas. Fue bien divertido todo, fue como en camara lenta... para mi, duro mucho mas de lo que duro en realidad.

Adelante de nosotros venia otro auto, y al frente de el, habia otra subida. Era como una semituberia. El auto trato de subir, pero no pudo... el camino congelado estaba demasiado resbalozo para poder tener traccion y ahi quedo.

Y nosotros, bajando y bajando... no tan rapido, pero tampoco lento. Y el auto de adelante, parado en la subida y se nos venia encima... y cada vez mas cerca...

Y yo que venia de copiloto...

- NICO DOBLAAAAAAAAAA!!!

Y miro al nico, que tenia una atroz cara de tranquilidad, tenia el volante entero girado hacia el otro lado. La van dejo de ser van, y se convirtio en un ladrillo.

Y la van, derechito como si no supiera de direcciones, se avalanza directo, frente a frente contra una muralla de tierra y nieve que se veia cada vez mas cerca.

Todos teniamos cinturon de seguridad, pero de puro instinto puse las manos en el tablero para aguantar mejor el pencazo... y ahi que se viene la tierra, se viene la nieve, se viene la muralla y...

... pup.

Asi hizo la van contra la nieve. Ningun escandalo, ningun ruido extranio, nada de nada! Lo unico, botamos dos letreros camineros que se cruzaron en nuestro fatal recorrido.

Todos quedamos plop.

Sacamos a la van de ahi, y justo al lado, nos bajamos todos para evaluar los danios.



Total... nada!

No nos habia pasado nada, y a la van, ni un rasgunio.

Despues de eso, la experiencia nos sirvio para comprender que en caso de hielo, los frenos mas que ayuda, molestan y la unica solucion es andar como las tortuguitas.

Asi que nos convertimos inmediatamente en los abuelitos al volante.

Total, que mejor que aprender cayendo?

En un cafe, de los muchos cafes que hay en el mundo, en una ciudad, de las muchas ciudades que hay en el mundo, escribo estas lineas... para ti.
:: a las 6:05 a. m., fueron palabras lanzadas a los vientos por Alvaro Roman!!!