Las increibles aventuras de marcianito luminoso!
sábado, mayo 21
Una escoba con dos ruedas.
Anoche descubri que soy como una morsa o un cocodrilo en la arena, o como un pinguino en la nieve.
Los que leyeron a harry potter, recuerdan a Viktor Krum? Era un cojonudo brujo ruso, que era bien idiota y torpe en el suelo, pero que una vez subido en su escoba voladora, era el mas veloz y agil de todos los demas brujos cojonudos.
Asi me siento yo.
No soy tan agil como el cojonudo Viktor, pero me di cuenta anoche, despues de caminar alrededor de 4 kilometros de mi trabajo a la casa de la andy a buscar mi bicicletita, no podia mas con un dolor en mi rodilla izquierda que me provocaba una cojera insolente y maldita.
Al llegar, ya pensaba en arrastrarme. Tomo mi bicicletita linda, me subo, avanzo y...
...Todo se hace suave, fluido y silencioso. A pesar que el frio congelaba cualquier tentativa de salir, yo reia sobre mi bicicleta, mientras avanzaba velozmente por las calles humedas y vacias, mirando como en los charcos nocturnos, la luna llena, envuelta en colchones de nubes blancas, se reflejaba.
Eso les debe pasar a los pinguinos, cocodrilos y morsas cuando entran al agua.
O cuando el cojonudo de Viktor se sube a su puta escoba.
Los que leyeron a harry potter, recuerdan a Viktor Krum? Era un cojonudo brujo ruso, que era bien idiota y torpe en el suelo, pero que una vez subido en su escoba voladora, era el mas veloz y agil de todos los demas brujos cojonudos.
Asi me siento yo.
No soy tan agil como el cojonudo Viktor, pero me di cuenta anoche, despues de caminar alrededor de 4 kilometros de mi trabajo a la casa de la andy a buscar mi bicicletita, no podia mas con un dolor en mi rodilla izquierda que me provocaba una cojera insolente y maldita.
Al llegar, ya pensaba en arrastrarme. Tomo mi bicicletita linda, me subo, avanzo y...
...Todo se hace suave, fluido y silencioso. A pesar que el frio congelaba cualquier tentativa de salir, yo reia sobre mi bicicleta, mientras avanzaba velozmente por las calles humedas y vacias, mirando como en los charcos nocturnos, la luna llena, envuelta en colchones de nubes blancas, se reflejaba.
Eso les debe pasar a los pinguinos, cocodrilos y morsas cuando entran al agua.
O cuando el cojonudo de Viktor se sube a su puta escoba.
En un cafe, de los muchos cafes que hay en el mundo, en una ciudad, de las muchas ciudades que hay en el mundo, escribo estas lineas... para ti.
:: a las 3:20 p. m., fueron palabras lanzadas a los vientos por Alvaro Roman!!!