Las increibles aventuras de marcianito luminoso!
domingo, abril 10
Dia numero trescientos treinta y ocho: Flippy.
Si alguna vez has visto los happy tree friends vas a entender de lo que hablo. Si no los has visto aun, apreta aqui y me vas a entender.
Dentro del selecto grupo de los tiernos ositos de happy tree friends, hay uno que se llama flippy, y es en si, particularmente tierno. Flippy, es un hermoso y dulce osito, muy predispuesto y sociable. Todos lo quieren mucho y es famoso por su cordialidad...
Flippy
Pero flippy estuvo en la guerra y quedo con traumas sicologicos que hacen que cada vez que ve algo parecido a la sangre, se trastorna...
... muta...
y le da por hacerlos mierda a todos.
Bueno, ayer me entere que flippy vive conmigo: Desgraciadamente mi hermano javier, emulo su peculiar personalidad, porque en un momento de sepa dios que, en un incontenible y desgraciadamente desafortunado sentimiento de la mas pura violencia, descargo la mas sicopata de todas las actitudes contra un auto estacionado, que si pudiera hablar, lo mas seguro es que diria:
- Y yo que hice?
De nada sirvieron las putedas ni las sacadas de madre, el no pudo contener su desquiciada mentalidad, hacerle mierda la puerta a un auto inocente, y adquirir automaticamente el no prestigioso apodo de:
Flippy.
Dentro del selecto grupo de los tiernos ositos de happy tree friends, hay uno que se llama flippy, y es en si, particularmente tierno. Flippy, es un hermoso y dulce osito, muy predispuesto y sociable. Todos lo quieren mucho y es famoso por su cordialidad...
Flippy
Pero flippy estuvo en la guerra y quedo con traumas sicologicos que hacen que cada vez que ve algo parecido a la sangre, se trastorna...
... muta...
y le da por hacerlos mierda a todos.
Bueno, ayer me entere que flippy vive conmigo: Desgraciadamente mi hermano javier, emulo su peculiar personalidad, porque en un momento de sepa dios que, en un incontenible y desgraciadamente desafortunado sentimiento de la mas pura violencia, descargo la mas sicopata de todas las actitudes contra un auto estacionado, que si pudiera hablar, lo mas seguro es que diria:
- Y yo que hice?
De nada sirvieron las putedas ni las sacadas de madre, el no pudo contener su desquiciada mentalidad, hacerle mierda la puerta a un auto inocente, y adquirir automaticamente el no prestigioso apodo de:
Flippy.
En un cafe, de los muchos cafes que hay en el mundo, en una ciudad, de las muchas ciudades que hay en el mundo, escribo estas lineas... para ti.
:: a las 11:23 p. m., fueron palabras lanzadas a los vientos por Alvaro Roman!!!