Las increibles aventuras de marcianito luminoso!

miércoles, febrero 2

Lo que paso mientras no estuve...

Hace mas o menos 5 o 6 dias que no llegaba a mi casa, y en el post anterior estaban mas que aclaradas las razones.

Hoy, desisti y tome la desicion que tanto carrete, barullo, parranda y farandula, debia terminar algun dia, y que mejor dia que hoy.

Asi que tome mi ajetreado cuerpo y lo dirigi por fin, a mi casa.

Y con que me encuentro?

- Un amigo de mi papa, quien tuvo el papel protagonico en una polemica y poco prestigiosa discusion domestica, se quedo mas tiempo de lo normal en mi casa porque le prohibieron la entrada a la suya. Se gano un pasaje de ida a cualquier lugar lo suficientemente lejos...

...Que mejor que nuestra casa...



- Mi hermana menor, la loreto, se fue a Chiloe ( la isla mas grande de sudamerica ) con unos parientes y no vuelve hasta fines de febrero.



- Ante todos los esfuerzos, sacrificios y exhaustivos metodos de limpieza, aun permanecen los vestigios evidentes del desastre que tuvo lugar en la cocina de esta casa:

Mi hermana, evidentemente es mujer, y eso trae consigo un sinnumero incontable de desastres propios de su problematica sexualidad, dentro de las cuales se encuentra la tan mal mirada y peligrosamente odiada "problematica de la depilacion".

La pajarita, metio en una olla la pelotudez que usan para sacarse los pelos de las patas, le prendio fuego para empezar a calentarla y se fue a hacer sus cosas.

Eligio la ropa con la que viajaba, se peino, ordeno su pieza, hizo su bolso, y de la maldita basurita de la cera, nada.

Cuando tuvo que ir a la cocina a buscar quien sabe que, se encontro con el peor desastre que ha asolado nuestra maravillosa cocina: UNA NUBE DE HUMO NEGRO, DENSO COMO UNA ESPONJA, LLENO COMPLETAMENTE Y HASTA EL ULTIMO RINCON DE LA COCINA. La cual afortunadamente estaba con la puerta cerrada.

El gas, negro como la oscuridad de mordor en el señor de los anillos, ocupo todos los espacios y los que tuvieron la oportunidad de entrar para abrir las puertas y ventanas de la cocina, aseguran que era como estar de noche alli adentro.

Una vez abiertas las puertas y las ventanas, el pololo de la loreto fue a buscar un ventilador para corretear esa viscocidad funebre del aire y poder descanzar en paz y una vez conseguido, un momento antes de suspirar de alivio vieron con el horror en sus ojos, como el humo negro y solido habia dejado su marca en cada centimetro de la cocina:

LO HABIA DEJADO TODO NEGRO.

Cada vaso, cada tenedor, cada plato, mesa, meson, ventana, mantel o fruta estaba cubierta por una capa negra y grasosa de sustancia negra fuertemente adherida.

Estuvieron limpiando y fregando suelo, mesones y paredes toda la tarde. Y debo decirlo, hicieron un buen trabajo. Porque si mi mama no me pide que mire para el techo, quizas no me hubiera dado cuenta que todavia estaba todo negro.

A modo descriptivo, abrio un estante para mostrarme como estaban aun, las cosas cubiertas de negro.

Lo peor ya paso, y la oscuridad ya se ha disipado. Pero por mucho que limpien, frieguen, griten, pataleen o lloren, siempre existira quien sabe que pequeño rincon manchado de negro, unica evidencia del desastre funebre que tuvo ocurrencia en ese lugar.

Y todo gracias a ella.

En un cafe, de los muchos cafes que hay en el mundo, en una ciudad, de las muchas ciudades que hay en el mundo, escribo estas lineas... para ti.
:: a las 9:07 p. m., fueron palabras lanzadas a los vientos por Alvaro Roman!!!