Las increibles aventuras de marcianito luminoso!

jueves, julio 22

La historia del Baileys

Era la madrugada cuando desperte. ( madrugada 5 de la tarde ) Y desperte con el sonido tan caracteristico e inconfundible de un telefono... tu debes saber como suena, sobretodo si te despierta.

Contesto. Siberiano: Si? Que pasa?? Queee??? un 39 en la prueba???? Que????? a las 5 alla?????? Son las 5!! Y si sigo describiendo la converzacion los signos de interrogacion se hacen eternos.

El asunto, es que me llamo para avisarme que me falto una pregunta por responder para poder aprobar mi ramo. Ahora entenderan porque tantos ¿QUE?. Yo asumi que reprobaba, y asumi bien. Me dijo que tenia que estar ahi hace 5 minutos para corregir mi prueba y fue lo que hice.

En mi desesperacion, me puse los pantalones, despues los calzoncillos, despues me peine con mi cepillo de dientes y me lave los dientes con una peineta, de gorro me puse un calcetin, y de calcetin un gorro. Fue un caos, debo reconocerlo.

Tome mi bicicleta, llovia pero no importaba. En ella alcance velocidades siderales, los arboles pasaban como rayos a mis lados, las piedras se hacian a un lado para dejarme pasar, y el viento buscaba mis alas para hacerme volar. Ahh! Y el efecto de perro mojado se multiplico por mil. En fin, si hubiera habido algun juez ahi, al llegar hubiera recibido mi medalla de oro. Pero no importaba, solo queria llegar.

Y llegue. Embarrado como estaba, parti veloz y presuroso a conversar mi situacion. Tenia un 39, y aprobaba con un 40. Estuve alrededor de una hora esperando que me atendieran, y en ese intertanto mi vida paso frente a mi varias veces. El tata, que tambien estaba en mi situacion, entre palabra y palabra, me dijo que si aprobaba se tomaba un baileys, y le dije que si aprobaba yo, lo tomabamos juntos. Finalmente el batallon de fusilamiento, me aviso que era mi turno. Me encamine, salude correctamente, y recivi mi prueba para revisarla.

Estuve ahi nose cuanto rato, las horas se hicieron minutos, o los minutos horas, ya ni se, y todo estaba en orden. El profesor me pidio la prueba y me dijo que no habia nada que hacer. Me miro con cara divertida y me dijo que me parara a su lado...

¡¡¡ Y QUE CAMINARA CON LAS MANOS !!!

Yo no lo podia creer. El tiempo se detuvo y no sabia que hacer. El tata por detras me decia: Hazlo, hazlo!!! Y cuando yo estaba poniendo las manos en el suelo, el profesor se levanta, me da la mano y...

... Me voy a tomar un baileys con el tata.

En un cafe, de los muchos cafes que hay en el mundo, en una ciudad, de las muchas ciudades que hay en el mundo, escribo estas lineas... para ti.
:: a las 8:35 p. m., fueron palabras lanzadas a los vientos por Alvaro Roman!!!